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martes, 9 de noviembre de 2021

Tarta de limón superfácil

La receta de hoy no puede ser más fácil, solo tenemos que mezclar y enfriar y está buena no, lo siguiente. Eso sí, como contrapunto tiene que sus ingrendientes son una bomba calórica, pero de lo más fácil de encontrar en el supermercado. Lo tipico para hacer un día antes o unas horas antes de una comida familiar o con amigos. Seguro que con un poco más de maña luce más que la que os muestro.

La receta la conocí por el canal de yiya en la cocina, el cual recomiendo un montón porque muchas de las recetas que hago se basan en las suyas y siempre salen fenomenal. 

Ingredientes:

550 gramos de queso crema (philadelphia)

160 g de galletas María ( 1 rulo de galletas de los cuatro que trae el paquete)

1 lata de 740 g de leche condensada

350 g de nata para montar

220 ml de zumo de limón

Coco rallado

Elaboración:

Primero trituramos 4 galletas para utilizarlas en la decoración, poniéndolo por encima, en el borde. Lo retiramos hasta el final de la elaboración que será cuando lo utilicemos.

A continuación exprimimos los limones, a mí con dos me dio para la cantidad que utilizamos en la tarta, tiene una pizca de sabor a limón, sólo, no os penséis que sabe mucho. Si os gusta más potente de sabor, os recomendaría más cantidad.

Comenzamos la elaboración de la mezcla, echando los 550 g de queso crema, junto con la lata de leche condensada, los 350g de nata y por último el zumo de limón. Lo ponemos en el robot 1 minuto a velocidad 4. Esta receta no necesita para nada robot, si lo prefieres, puedes hacerlo en batidora hasta que se integren bien todos los ingredientes, sin más.

Para formar la tarta, sobre un molde desmontable, disponemos en la base una capa de galletas maría, intentando cubrir al máximo y luego echamos una capa de la mezcla de la tarta y la aplanamos para conseguir que esté nivelada. A continuación, añadimos por encima otra capa de galletas y otra capa de mezcla, otra capa de galletas y otra de mezcla y ya estaría. Para finalizar, la dejamos enfriando 12 horas en el frigorífico y como decoración añadimos dos circunferencias, una en el exterior con la galleta triturada y otra más interna con coco rallado. 

Os presento la muestra de como nos quedó, no hice muchas fotos, es una pena porque no son las mejores.




Nota:

La galleta era para echar solo por los bordes y sobra, pero en casa gustó especialmente el contraste del polvo de galleta con la tarta y lo echamos finalmente sobre toda la superficie cuando ya lo teníamos en el plato.

Nosotros hicimos 200 ml de zumo de limón y apenas se notaba, intentad echar más cantidad si queréis que se note especialmente el limón. De otro modo, está super buena. 

Aunque de primeras os pueda sonar raro, las galletas interiores no quedan nada secas, absorben la mezcla y no es necesario ningún tipo de acompañamiento, se queda blandita y muy cremosa.