¿Quién no ha hecho nunca un bizcocho de yogur? ¿Puede haber un postre más sencillo? Si aún hay alguien que no lo reconozca, es el típico bizcocho que preparas utilizando la medida de un envase del yogur que vas a utilizar.
Para ahora que empieza el frío es ideal para tomar con un chocolate caliente, en una merienda o desayuno. Espero que si no lo habéis hecho nunca, os animéis a probar, no tiene ninguna complicación.
3 huevos
Un yogur natural
1 medida del envase del yogur de aceite
2 medidas del envase del yogur de azúcar
3 medidas del envase del yogur de harina
Medio sobre de levadura en polvo
Medio limón
Mantequilla para engrasar el molde
Elaboración
Se unta el molde donde haremos el bizcocho con mantequilla. Se separan las yemas de las claras. Las claras se depositan en un bol bien seco, se le añade unas gotas de limón y se las pone a punto de nieve bien firme.
A continuación, se le añaden las yemas y el azúcar y mientras se sigue batiendo. cuando quede una crema fina, se retira el batidor, se añade yogur, aceite y el zumo de limón. Se mezcla bien y se va añadiendo, poco a poco, la harina y la levadura en polvo. Se mezcla bien todo y se vuelca esta crema en el molde.
A continuación, se le añaden las yemas y el azúcar y mientras se sigue batiendo. cuando quede una crema fina, se retira el batidor, se añade yogur, aceite y el zumo de limón. Se mezcla bien y se va añadiendo, poco a poco, la harina y la levadura en polvo. Se mezcla bien todo y se vuelca esta crema en el molde.
Encedemos el horno cinco minutos antes para precalentarlo. En nuestro caso, usamos un horno eléctrico, a 180ºC durante 40 minutos, aproximadamente. Vamos comprobando que el bizcocho está bien hecho introduciendo una aguja o palillo largo en el mismo. Si sále limpia/o el bizcocho ya está cocido. Una vez está cocido, se retira del horno, se deja reposar dentro del molde unos cinco minutos y después se le da la vuelta sobre un plato. Una vez frío se puede espolvorear con azúcar molida a modo de decoración.
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